Lo que deberían hacer los motociclistas en época de Covid-19

Ahora que hablamos de una nueva normalidad a la que debemos adaptarnos, en la que las restricciones de movilidad son más distendidas a efectos de reactivar la economía, las precauciones no deben dejarse de lado, es más deben extremarse, pues el virus no se ha ido y los conductores de motocicletas al ser de los actores más vulnerables, sobre todo en calles de las urbes, deben mantener una disciplina especial.

El bajo costo de las motos urbanas frente al costo de otras alternativas de transporte personal, el menor gasto operacional y su practicidad para circular en las cada vez más congestionadas vías citadinas, son los principales argumentos que han motivado el auge de las motocicletas como medio de transporte personal y de trabajo en muchos países de la región.

Además, la crisis sanitaria y sus exigencias en materia de bioseguridad le dan otro punto a favor para el uso de las populares motos, pues circular en ellas favorece el distanciamiento social y por tanto reduce las posibilidades de contagio en comparación con el transporte público masivo, a pesar de que se respete el aforo establecido por las autoridades.

Por ello, las nuevas condiciones de vida también exigen que los usuarios de motos sumen a los tradicionales protocolos de seguridad, algunas medidas adicionales que garanticen su bienestar. En este contexto, a continuación, se ofrecen algunos consejos prácticos que deberían ser tomados en cuenta para que la movilización alternativa en motocicleta sea más segura:

• Elección adecuada de los neumáticos: siempre se debe recordar que, bien sea en auto o en moto, las llantas son el único elemento que mantiene contacto permanente entre el vehículo y la calzada. Por ello es fundamental que estas se seleccionen adecuadamente, sobre todo a la hora de reponerlas o de comprar una moto de segunda mano, considerando siempre el tipo de motocicleta que se vaya a conducir y el uso que se le dará.

Aquí entra en juego un factor especial a la hora de escoger los nuevos neumáticos; la ingeniería, la innovación y la tecnología son variables que determinan la calidad de los mismos, pues hay marcas y marcas. Además de las especificaciones técnicas de cada llanta, que se integran para favorecer aspectos como su desempeño, también la calidad de tracción, su performance de maniobrabilidad y el nivel de seguridad que ofrecen, deberían tomarse en cuenta.

 

 

• El correcto mantenimiento de las llantas: considerando la importancia de estas, es vital revisar en forma periódica su nivel de desgaste, pues de esto dependen el agarre y la tracción. Además, hay que asegurarse de que la presión de las llantas sea la correcta, lo que reduce el riesgo de perder el control de la motocicleta. La alineación y el balanceo de las mismas, también deben formar parte de una rutina de revisión periódica.
• Observar la distancia y velocidad adecuadas a la hora de conducir, respetando las normas de tránsito que para el efecto existen, y siempre apelando a la prudencia al volante, son indispensables a bordo de una motocicleta.

Conducir sin excesos de velocidad, permitirá tener más tiempo de reacción en caso de un imprevisto o percance. Además, en el marco de esta nueva normalidad, mantener una distancia de seguridad con respecto a otros vehículos es una norma indispensable, no solo para evitar un posible choque, sino también como medida de bioseguridad, tal y como debemos hacerlo cuando caminamos, guardando la distancia adecuada para evitar ser contagiados.

 

 

Los semáforos y los trancones son puntos álgidos, donde especialmente hay que evitar quedar muy cerca de otros motorizados o de conductores de autos que lleven las ventanas abiertas, y si respetas los sitios de cruce para peatones también estarás a buen recaudo, al igual que ellos.

• Utilizar siempre el casco homologado y la ropa de protección adecuada: es muy importante utilizar un casco con sistema de abrochado, resistente y certificado para la protección de motociclistas, así como los accesorios de protección idóneos, esto es: guantes, botas y chaqueta con reflectivos de alta visibilidad o chaleco para el efecto.
• Lavar meticulosamente la moto: Si el usuario la conduce durante todo el día o estaciona la moto en distintos sitios de la ciudad, se recomienda su lavado diario, sin olvidar el aseo adecuado de las manos, antes y después de limpiarla. No hay que olvidar secar muy bien la motocicleta para evitar que la humedad produzca desperfectos.

 

 

• Desinfección de superficies de contacto frecuente: lo más recomendable es llevar siempre un desinfectante en envase portátil para aplicarlo regularmente en áreas de contacto continuo como el manubrio, los manillares de freno y embrague, el pedal de freno, botones de luces y espejos. Esto también aplica para las llaves de encendido.
• No guardar los guantes dentro del casco: muchos usuarios tienen esa costumbre por comodidad, pero en las circunstancias sanitarias actuales es vital no hacerlo por el riesgo de llevar el covid-19 al interior del casco, el que luego estará en contacto directo con las vías respiratorias y mucosas de ojos, nariz y boca. Lo más recomendable es llevar los guantes en la mano y lavarse las manos después de guardarlos.
• Nunca compartir el casco ni la indumentaria: esta es una medida fundamental para evitar que otra persona los contamine o se contagie. Aquí también es importante recordar el uso del tapabocas (mascarilla) cuando vas a salir y al momento de conducir.
• Mantener aislada y aseada la indumentaria de protección: al llegar a casa, lo más recomendable es retirar por completo todo el equipo de conducción, esto es: guantes, chaqueta, casco y botas/calzado, y dejarlos en un espacio apartado y mejor aún ventilado. Lo ideal es lavar dicho equipo en forma periódica. (E.Ch./AC/AM)