La electromovilidad como solución al cambio climático
Stella Li, vicepresidenta ejecutiva de BYD y presidenta de BYD Américas, por el Día del Clima, al respecto ha manifestado:
El cambio climático constituye una amenaza para el bienestar de la humanidad y la salud del planeta. Así lo concluyó el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) en su sexto informe (AR6) ya en agosto de 2021.
Hoy, en el Día del Clima, 26 de marzo, debemos preguntarnos qué estamos haciendo todos para actuar con la urgencia que la situación amerita. ¿Qué prioridad están dando los Estados a las políticas climáticas? ¿En qué medida están innovando las empresas para acabar con el «business as usual«? ¿Cómo nos estamos replanteando los ciudadanos nuestras formas de vida si queremos seguir habitando la Tierra?
La electromovilidad se perfila como una opción real para responder a los retos climáticos y medioambientales, a través de un transporte moderno, eficiente y, sobre todo, más limpio.
Según el Sexto Informe del IPCC, es imprescindible una reducción inmediata de las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) en todos los sectores para limitar el calentamiento global a 1,5 °C, lo que implica una reducción de entre el 40% y el 70% de las emisiones del transporte para 2050 en comparación con 2020.
Se trata de un reto enorme, teniendo en cuenta que la demanda en este sector va siempre en aumento. Se calcula que el transporte de pasajeros se multiplicará por 2,3 en 2050 y el de mercancías por 2,6, según la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE).
Lucha contra el cambio climático
La electromovilidad reduce los gases de efecto invernadero, contaminación y residuos, y mejora el rendimiento del vehículo y el costo de mantenimiento. Los vehículos eléctricos consumen una quinta parte de la energía de los vehículos de combustión interna y emiten menos ruido, gases y partículas, lo que mejora la calidad del aire y del ambiente, frenando y previniendo enfermedades.
Las baterías eléctricas tienen una segunda vida útil como soluciones de almacenamiento de energía, lo que completa la economía circular. Los motores eléctricos tienen menos piezas móviles, lo que reduce significativamente los costos y genera ahorro en combustible.
La electromovilidad ofrece una solución de transporte sostenible y más eficiente para responder al aumento de la demanda de transporte sin comprometer la calidad del aire y del planeta que compartimos.
BYD, líder mundial en tecnologías verdes, se convirtió en marzo de 2022 en la primera automotriz en abandonar la producción y venta de vehículos de combustión. Su objetivo es reducir 1°C la temperatura de la Tierra, y ya hemos fabricado más de 3 millones de vehículos de nueva energía. Sin embargo, se necesita que los Estados aceleren la transición al transporte eléctrico y fomenten la colaboración público-privada para habilitar el sistema (infraestructura, etc.).
Ecuador es el país ideal para la movilidad eléctrica
Su electricidad proviene en un 90% de fuentes renovables, motivo por el que los vehículos eléctricos están completamente exonerados de cualquier pago tributario y cuentan con una tarifa eléctrica especial, un 40% menor a la tarifa normal.
La Estrategia Nacional de Electromovilidad establece como objetivo contar con 100.000 vehículos eléctricos hasta el 2030. BYD es un socio importante para Ecuador en esta ruta hacia una movilidad cero emisiones.
ByD cuenta con la mayor flota de buses, taxis y vehículos de carga eléctricos del país. Sus modelos Han, Tang, Yuan Plus, Dolphin, entre otros, estarán disponibles para el público a partir del segundo semestre de 2023.
Con esta medida, la marca busca darle al mercado nacional el último empuje para la masificación de los autos eléctricos, para así evitar la emisión de miles de toneladas de CO2.
Cortesía: AUTO Magazine