Alternativas de movilidad promueven ciudades más seguras
Convertida en un aliado para la movilidad en ciudades como Quito y Guayaquil, donde opera desde 2016, la empresa Cabify promueve espacios más seguros e inclusivos y maneja altos estándares éticos, no sólo para brindar un servicio que haga de las localidades donde opera mejores lugares para vivir, sino también para trabajar de la mano de las autoridades con el fin de lograr regulaciones inclusivas, que fomenten el emprendimiento y la sana competencia.
En ese sentido, en enero de 2020 esta empresa presentó una propuesta para definir e incluir el concepto de categoría de “servicio de transporte particular” en la Ley Orgánica de Transporte Terrestre, Tránsito y Seguridad Vial de Ecuador, basado en que su servicio es una modalidad de transporte particular que cuenta con el aval de plataformas tecnológicas como intermediarias y que se administran por empresas establecidas legalmente en el país.
En cuanto a esta Ley, el pasado 21 de julio, se dio inicio al segundo debate en la Asamblea Nacional. La empresa manifestó que se mantendrá atenta a las resoluciones que se tomen, a la espera de que lo que se apruebe sea en beneficio de una convivencia saludable y de mantener un entorno favorable a los diversos actores de la movilidad.
Bajo las leyes y regulaciones ecuatorianas, Cabify está constituida formalmente en el país, siendo contribuyente activo con el Servicio de Rentas Internas (SRI). Además, es un importante actor de economía colaborativa en Ecuador, que logró incluir en el 2019 la categoría Taxi, con el objetivo de ofrecer a sus clientes la opción de utilizar taxis amarillos. Esta categoría ha logrado sumar cada vez más conductores adeptos, apoyando con una herramienta tecnológica al gremio del taxismo.
Además, durante la emergencia sanitaria provocada por el Covid-19, la empresa creó la categoría “Cuanto antes”, que reunió a los conductores de las categorías regulares Taxi y Lite en una sola. Con ello, los viajes realizados en taxi aumentaron del 25% al 40%. Los conductores de taxis accedieron a más viajes y por tanto a más ingresos, gracias también a la implementación del método de pago con tarjetas, tanto de crédito como de débito.
Además, para precautelar la salud y bienestar de los usuarios, la empresa puso en marcha un plan global de inversiones valorado en 1 millón de dólares, para facilitar el suministro de mascarillas, sanitizantes para vehículos, guantes y gel antibacterial a decenas de miles de sus conductores.
En los vehículos de los socios conductores también se instalaron pantallas aislantes de cabinas para tornarlas bioseguras; se acató cada lineamiento del COE Nacional, como el horario del toque de queda y calendarización para la circulación según el número de placa de los vehículos; y se brindó información constante y actualizada de las directrices de seguridad emitidas por la OMS.
Respecto a todo esto, Jorge Romero, Country Manager de Cabify Ecuador comentó: “Nuestra intención es continuar desarrollando nuestras actividades en Ecuador, respetando y cumpliendo las regulaciones locales. Hemos creado un modelo de negocio sostenible que ha beneficiado a los usuarios de nuestra app, que han visto una solución de movilidad en nuestro servicio… ratificando nuestro compromiso por seguir brindando oportunidades para mejorar la movilidad de las ciudades donde operamos e impulsar beneficios a sus usuarios y socios conductores, a través de un modelo de negocio de economía colaborativa”.
