Necesitamos educación preventiva sobre la ingesta de alcohol
Ecuador se encuentra en el octavo puesto del ranking de países con mayor consumo de alcohol en América Latina, según las estadísticas realizadas, el año pasado, por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Se estima que cada persona consume 5,1 litros anualmente en nuestro país, y las cifras de la región hacen que los entes internacionales se preocupen por una crisis de salud pública en la zona.
Según datos del INEC, 912.576 personas consumen bebidas alcohólicas, de las cuales el 89.7% son hombres y el 10.3% son mujeres, que comienzan desde edades tempranas con la ingesta de bebidas espirituosas. Los individuos entre 19 y 24 años encabezan una lista que más preocupa a las autoridades de salud pública.
El alcohol, para la OMS, contribuye con el desarrollo de más de 200 enfermedades de tipo degenerativo y catastrófico, y es el principal factor de riesgo de muerte en adolescentes.
Además, es una de las principales causas de accidentes de tránsito, en las carreteras y vías de nuestro país. En lo que va del 2018, se ha alcanzado la tasa de mortalidad más alta de los últimos cinco años, con 1.058 fallecidos en 12.260 siniestros, según información de la Agencia Nacional de Tránsito. Es decir que, además de los daños perjudiciales e irreparables para la salud, el alcohol es el principal causante de la destrucción y separación familiar.
Una manera de cambiar las estadísticas es educando en salud y buenas costumbres a la población y de esta manera generando conciencia entre los ecuatorianos, sobre todo durante las celebraciones más populares, como las Fiestas de Quito y de otras ciudades, la Navidad y el Año Nuevo.
Recordemos que el alcohol no es indispensable para disfrutar de estas épocas festivas, y que, si lo consumes NO debes conducir.
